El sangrado de las encías es uno de los problemas de salud más frecuentes en el mundo y se considera uno de los primeros signos de enfermedad en las encías.
¿Por qué sangran nuestras encías? Si hay una infección, nuestro cuerpo trata de defenderse montando una respuesta inmune, lo que lleva a la inflamación. Esto hace que los vasos sanguíneos sangren al menor trauma debido a la hinchazón y el adelgazamiento de sus paredes.
Cuando las encías se enfrentan a cálculo dental (comúnmente denominado “sarro dental”), se inflaman para formar una defensa contra las bacterias encerradas dentro del cálculo. Esto hace que sean muy susceptibles al sangrado. Del mismo modo, después de acciones que provocan una presión mecánica sobre las encías, como morder una manzana o cepillarse los dientes, los capilares agrandados por la inflamación se traumatizan y comienzan a sangrar.
El problema del sangrado gingival sólo puede resolverse eliminando el cálculo causal. Después de que se elimina el cálculo, los capilares se estrechan, la hinchazón y el enrojecimiento remiten, y la encía vuelve a su aspecto rosado saludable natural. Aunque se deben utilizar diferentes técnicas según la gravedad de la enfermedad de las encías, el raspado dental ultrasónico siempre es una prioridad.
La enfermedad de las encías (técnicamente denominada enfermedad periodontal) es una enfermedad inflamatoria causada por la acción de la placa bacteriana y la acumulación de sarro en los dientes.
Los síntomas incluyen enrojecimiento de las encías, hinchazón, mal aliento, sangrado en las encías, desplazamiento de los dientes y recesión gingival. El síntoma más común entre estos es el sangrado gingival. En las etapas iniciales de la enfermedad periodontal, solo se ve afectada la encía, por lo que se la denomina gingivitis, mientras que, en las etapas medias y avanzadas, el hueso circundante también puede verse afectado, pasándose a llamar periodontitis.
Para todas las enfermedades gingivales, el raspado ultrasónico y una higiene bucal óptima son los primeros pasos del tratamiento. Según el grado de progresión de la enfermedad, una solución puede ser utilizar un láser dental que desinfecta y limpia las superficies dentales durante una serie de visitas.
Si la enfermedad sólo ha afectado a las encías, puede ser suficiente eliminar el cálculo y mantener una buena higiene bucal. La limpieza del sarro es el proceso de eliminar el cálculo, la placa y las manchas acumuladas en la superficie del diente. Se realiza con la ayuda de herramientas especiales y debe hacerse regularmente incluso en individuos sanos. Sin embargo, casos más severos como en los que hay movilidad dentaria avanzada pueden requerir la extracción de las piezas afectadas.
En los casos en que la enfermedad esté más avanzada, puede ser necesario un curetaje, que requiere una limpieza profunda debajo de la encía.
Entre la encía y la superficie del diente se forman lo que se denominan “bolsas periodontales”. Durante el raspado, la superficie de la raíz se limpia al entrar en la bolsa, mientras que el tejido gingival de la misma bolsa se limpia durante el proceso de curetaje. Este proceso se puede realizar con métodos convencionales utilizando herramientas manuales, o se puede realizar con láseres Er:YAG.
Si un diente es afectado por una lesión de caries, podemos decir que solo ese diente conlleva un riesgo. Pero dado que la enfermedad periodontal es un problema que generalmente afecta a todos los dientes, pone en riesgo a toda nuestra dentición.
Por ello, su detección y tratamiento es muy importante para conservar la salud bucal. La movilidad dentaria (dientes flojos), puede deberse a varios factores, como rechinar o apretar los dientes, pero es más probable que sea consecuencia de la enfermedad periodontal. Esta situación es muy común, pero tiene una alta tasa de éxito cuando se trata en las primeras etapas.
Si la movilidad se limita a unos pocos dientes, esto a veces significa que la enfermedad sólo avanzó localmente. También puede deberse a factores que causan una pérdida ósea avanzada alrededor de un solo diente, como la inflamación alrededor del ápice (la punta) de la raíz causada por la caries dental.
Tratamientos láser
Las encías son barreras protectoras sobre los dientes.
Sin embargo, la recesión de las encías es común, especialmente en personas con un tipo de encía delgada. La recesión gingival es comúnmente causada por la acumulación de cálculo, pero también puede desarrollarse debido al hábito de apretar demasiado los dientes, un cepillado de dientes duro e incorrecto, activación gingival por la musculatura de los labios y las mejillas y fuerzas excesivas durante el tratamiento de ortodoncia. Las personas con recesión gingival pueden experimentar sensibilidad al frío y al calor, caries en las superficies radiculares expuestas y problemas estéticos.
Etapas del tratamiento
Cirugía funcional y estética
Formación indeseada de sarro
Respetuosa con el tejido dentario
La limpieza dental se puede realizar de forma manual con la ayuda de herramientas manuales especiales o utilizando un dispositivo ultrasónico llamado cavitador. Es importante quitarlo ya que, a medida que el sarro se adhiere a la superficie del diente con los materiales ácidos secretados por las bacterias en el interior, altera la suave estructura dentaria con el tiempo.
Contrariamente a la creencia popular, la limpieza del sarro no daña la superficie del diente. Su objetivo es eliminar los depósitos de sarro para obtener una superficie lisa tanto del diente como de la raíz. Como la limpieza del sarro no causa ningún daño al tejido dentario, la pérdida del diente que puede ocurrir con el tiempo en pacientes con enfermedad periodontal no está relacionada a este tratamiento.
Control periódico
Uno de los mayores riesgos para la salud bucal y corporal en general son las enfermedades de las encías, que pueden ser una fuente de inflamación en el cuerpo. Con la tecnología láser, es posible realizar tratamientos eficaces de encías inflamadas sin necesidad de incisiones ni puntos de sutura, al eliminar limpiamente los factores que alteran la biología tisular.
Dependiendo de la gravedad y el estadio de la enfermedad de las encías, también varía el tipo de tratamiento a aplicar. En el primer estadio, que se manifiesta con sangrado gingival, aún no se ha producido una disminución del nivel óseo, por lo que sólo la limpieza puede ser suficiente para el tratamiento.
Si el tratamiento no se realiza durante la primera etapa, en la que solo se ve afectado el tejido gingival, comienza la reabsorción ósea. Para ese entonces, limpiar y eliminar los depósitos de cálculo ya no es suficiente. También es necesario limpiar profundamente los dientes y los tejidos circundantes debajo de las encías. Después de esta limpieza (que se denomina curetaje subgingival y puede realizarse con láser), es posible obtener resultados de tratamiento duraderos si se siguen las recomendaciones de higiene bucal.
Si no se realiza el tratamiento necesario en esta segunda etapa, la reabsorción ósea continúa en los tejidos que rodean el diente. En este punto, ya empieza a ser necesario renovar el hueso alrededor del diente. Siempre se recupera el tejido óseo perdido utilizando materiales óseos artificiales a través de un procedimiento quirúrgico llamado «cirugía de colgajo». Sin embargo, hoy en día la periodoncia moderna intenta utilizar en menor medida los métodos quirúrgicos y recomienda tratamientos periodontales no invasivos.
Nuestra sonrisa es uno de los rasgos más característicos de nuestra personalidad. Para poder hablar de un diseño de sonrisa que aporte una verdadera estética bucal y dental, es necesario obtener una encía simétrica, sana y compatible con labios y dientes. Si durante la examinación clínica se detecta que las encías no tienen la forma correcta, la estética gingival se puede mejorar con el láser Er:YAG, que es un método fácil, saludable y muy exitoso en cuanto a la comodidad postratamiento.
Una recuperación biológica rápida y cómoda es muy importante en tratamientos estéticos como el diseño de sonrisa. Con los sistemas láser Fotona Er:YAG, se puede dar forma a las encías sin dolor y sin sangrado con anestesia mínima. La cicatrización es rápida y cómoda, ya que el láser activa biológicamente la cicatrización de los tejidos.
Una exposición excesiva o asimétrica de las encías, que se observa por ejemplo al hablar o reír, impide una bonita sonrisa. En tales casos, las mejoras dentales no crearán la estética que queremos. El procedimiento que se realiza para mejorar el aspecto de las encías se denomina nivelación gingival (ginginoplastia). También podemos llamar a este proceso estética rosa en general.
En nuestra clínica, utilizamos para realizar tratamientos de estética rosa láseres de tejido duro (Er:YAG), que también se utilizan para nivelar los tejidos gingivales y óseos sin necesidad de realizar procedimientos más extensos como la cirugía ósea abierta. Después de este procedimiento con láser, los pacientes a menudo ni siquiera necesitan tomar analgésicos.
La armonía y simetría de las encías con los labios y los dientes son tan importantes como el color y la estructura de los tejidos. Las encías sanas son de color rosa y una textura de piel de naranja. Es posible llevar la decoloración oscura y púrpura de las encías al color y la consistencia del tejido sano con el láser Er:YAG.
En algunas personas, un color oscuro puede ser dominante en las encías, así como el oscurecimiento de la piel. La capa más externa de la encía, llamada capa subepitelial, consta de tejidos pigmentados que dan color a los tejidos. En personas con tejidos densos se presenta un aspecto oscuro y puede causar molestias estéticas. Con el láser Er:YAG es posible eliminar los pigmentos y conseguir el aspecto rosado saludable deseado aplicando anestesia localizada (y a veces sin necesidad de hacerlo).
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