Cirugía oral y maxilofacial

Cirugía oral moderna

Cuando se utiliza el láser de tejido duro (ER-YAG) en lugar de los métodos tradicionales para eliminar el hueso alrededor del diente, la hinchazón y el dolor se reducen en un 80% y se acelera la cicatrización del tejido

Tipos de cirugía

01

Extracción dental

02

Extracción de cordales o muelas del juicio impactadas

03

Quistes dentales

04

Cirugía preprotésica

Extracción dental

La extracción dental debe ser la última alternativa para los dentistas.

Pero si es necesario extraer un diente, nuestro objetivo principal es extraer el diente con un enfoque conservador para luego usar técnicas que fomenten la formación de hueso y tejido gingival alrededor del sitio de extracción. Esto nos respalda en todos los tratamientos futuros, ya sean implantes u otro tratamiento.

Para este propósito, en odontología láser y biológica, los tejidos infectados se eliminan selectivamente con el láser Er:YAG después de la extracción, utilizando herramientas de extracción especiales que protegerán todos los tejidos circundantes con una aplicación meticulosa para la extracción.

A veces, la formación de tejido óseo y gingival se activa mediante el uso de técnicas de láser y, otras, mediante PRP, que contiene células de crecimiento hechas con la propia sangre de la persona.

Preguntas frecuentes sobre la extracción de dientes y muelas del juicio:

  • Si los dientes dañados por caries o fracturas no se pueden tratar con empastes, tratamientos de conducto, coronas o cualquier otro método de tratamiento.

  • Si el tejido óseo que sostiene el diente se ha perdido debido a una enfermedad periodontal severa, por la cual el diente ha comenzado a aflojarse, y no se puede salvar con un tratamiento gingival.

  • Si hay dientes de leche que no se caen cuando deberían.

  • Ganar el espacio necesario para la correcta disposición de los dientes en personas que van a someterse a un tratamiento de ortodoncia.

  • Si hay dientes retenidos, especialmente terceros molares, de los que es necesario extraerlos si provocan tirantez, hematomas o dolor en los maxilares.
  • Por lo general, no hay molestias después de extracciones sencillas, pero es posible que se requiera el uso de analgésicos.

  • Las extracciones quirúrgicas, por otro lado, pueden causar dolor ya que son más complicadas. Dependiendo de la dificultad de la extracción, los síntomas y la duración, las molestias a experimentar después de la cirugía varían. En la mayoría de los casos, el dolor desaparece a los pocos días.

  • Es importante que use los medicamentos que su médico le recetará según lo prescrito.

  • Después de la extracción, se aplica presión en la zona con una gasa durante al menos 30 minutos para ayudar a la coagulación de la sangre. En las próximas 24 horas, puede presentarse sangrado en forma espontánea en el sitio de extracción.

  • Se debe aplicar compresa de hielo en el área de la operación sobre la cara para evitar que se hinche. La hinchazón cede en los primeros días después de la cirugía.

  • No coma hasta que desaparezca el entumecimiento, puede morderse el labio o la mejilla entumecida sin darse cuenta.

  • No tome baños calientes y no consuma alimentos y bebidas calientes durante las primeras 24 horas.

  • Solo debe comer alimentos blandos durante los primeros días después de la extracción.

  • Hacer gárgaras con agua salada tibia (media cucharadita de sal en un vaso de agua) también ayudará a mantener el área limpia

 
La recuperación tarda de una a dos semanas en completarse:

  • Si el área se cerró con puntos de sutura después de la extracción, es posible que estos puntos deban retirarse una semana después del procedimiento.

  • El coágulo formado en la herida no debe desprenderse. Por lo tanto, no debe enjuagar con agua y escupir, no debe usar una pajita y no debe fumar. Estas acciones aumentan el sangrado y provocan que el coágulo de sangre formado en el alvéolo tras la operación se desprenda. Si esto pasa, puede ocurrir una inflamación dolorosa del hueso llamada alveolitis, que es probable que ocurra en el 5 % de todas las extracciones.

  • Las personas que fuman tienen un mayor riesgo de desarrollar alveolitis. Por esta razón, no se debe fumar hasta 2-3 días después del tratamiento.

Si no tiene un sistema inmunológico saludable, existe el riesgo de desarrollar una infección después de la extracción del diente. La complicación más común es la alveolitis, que ocurre cuando no se forma un coágulo de sangre en el alveolo donde se extrajo el diente, o cuando el coágulo de sangre se deshace demasiado pronto. En la alveolitis, el hueso subyacente queda expuesto de tal forma que puede entrar en contacto con el aire y restos de comida. Esta es una condición muy dolorosa que puede dejar un mal sabor y olor en la boca. Cuando ocurre, el médico debe limpiar y vendar la cavidad a ciertos intervalos para detener el dolor y sanar el área.

Las muelas del juicio suelen estar impactadas (es decir, cubiertas por encía o hueso) debido a su posición en el hueso maxilar. En los casos en los que una parte del diente está cubierta por la encía, a menudo se producen infecciones, que ocasionan mucho dolor, hinchazón y hasta dificultad para abrir la boca. Como resultado de estas infecciones recurrentes, el hueso alrededor de las muelas del juicio comienza a reducirse y se forma tejido inflamatorio en esta área.

Además, las muelas del juicio a veces pueden ejercer presión sobre los molares que se encuentran próximos a ellas. Esto puede producir dolor y apiñamiento de los dientes anteriores.

La extracción de las muelas del juicio generalmente se realiza quirúrgicamente. Puede haber hinchazón y dolor en esta área después de la extracción. Esta normalmente ocurre cuando hay tejido óseo alrededor de la muela del juicio, ya que el cirujano debe eliminarlo para poder extraer la muela. Cuando se utiliza el láser de tejido duro (ER-YAG) en lugar de los métodos tradicionales para eliminar el hueso alrededor del diente, la hinchazón y el dolor se reducen en un 80% y se acelera la cicatrización del tejido. Además, con la aplicación de láser de baja intensidad (LLLT) tras la extracción, se reducirá el período de recuperación y será aún más confortable.

En algunas personas, es posible que las muelas del juicio no se hereden en absoluto. También, si las muelas del juicio pueden encontrar un lugar en la mandíbula, erupcionan sin ocasionar inconvenientes como cualquier otro diente.

En este caso, si no causa problemas en cuanto a la salud bucal general, no es necesario extraer las muelas del juicio. Solo las muelas del juicio que han erupcionado en una boca con espacio inadecuado pueden hacerlo en una posición impactada o semi impactada y ocasionar problemas.

Hay ciertas situaciones en las que se debe extraer la muela del juicio. Estas incluyen casos en los que la muela del juicio está dañando los dientes y el hueso adyacentes, si la limpieza es difícil debido a su posición, si está dañada debido a caries o fractura, y si no se puede restaurar con un empaste, tratamiento de conducto, corona o cualquier otro método de tratamiento. Si la extracción no se realiza a tiempo, puede provocar que los dientes se amontonen o inflamación o daño permanente del diente anterior.
La extracción dental es el proceso de extraer el diente de su posición en el hueso maxilar llamado alvéolo. La extracción dental simple es la técnica que se utiliza para extraer dientes visibles en la boca bajo anestesia local.

La extracción quirúrgica es una técnica utilizada en la extracción de dientes que no se ven fácilmente en la boca, o aquellos que están rotos o impactados en el margen gingival. En algunos casos, el hueso puede cubrir el diente. En los procedimientos quirúrgicos, el diente a menudo se divide en secciones antes de extraerlo. Como en las extracciones normales, el procedimiento se puede realizar con anestesia local.

Para acceder al diente que se encuentra cubierto por hueso, se puede utilizar el láser Er:YAG. En las extracciones de muelas del juicio en las que se extrae el hueso con láser, el dolor y la inflamación después de la extracción es un 80% menor. Esto es muy importante para la comodidad del paciente.

Después de todos los procedimientos quirúrgicos en la mandíbula, incluida la cirugía de implantes, los tratamientos con láser de bajo nivel (DSLT) aplicados 3 veces pueden aumentar la calidad de la cicatrización, acortar el período de recuperación, reducir la hinchazón (edema) y el dolor.

Quistes dentales

Son tejidos patológicos en forma de bolsas que se forman en torno a la raíz de los dientes o en cualquier parte de la mandíbula. Antes del tratamiento, es necesario tomar imágenes tridimensionales (TVP) para determinar su borde y hacer un diagnóstico radiológico preliminar.

El tratamiento varía según la ubicación del quiste.

Hoy en día, los quistes que se originan en la punta de la raíz se pueden tratar con técnicas avanzadas de tratamiento de conductos radiculares con láser, PIPS/SWEEPS, o se pueden al menos reducir de tamaño para que requiera una cirugía mínima.

Otros tipos de quistes ya deben ser diagnosticados mediante examen radiológico, anamnesis y experiencia. En estos, es importante diagnosticar el riesgo patológico más que la dificultad quirúrgica. El uso del láser Er:YAG en cirugía de quistes no patológicos sirve para la extracción de hueso y de todos los tejidos extraños, reduciendo complicaciones como la hinchazón y el dolor después del procedimiento y el riesgo de recurrencia del quiste.

Cirugía preprotésica

Es un procedimiento quirúrgico que se realiza para transformar la boca del paciente, que actualmente no es apta para recibir una prótesis, en la forma anatómica ideal para hacerla más compatible con un aparato protésico. También se realiza para proteger la salud bucal y la comodidad del paciente después de la prótesis. Los procedimientos más comunes son los siguientes:

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